Por Emma Rodríguez © 2014 / Hay obras, personajes, pasajes y paisajes de la literatura capaces de pegarse a la piel de tal modo que es imposible desprenderse de todas las emociones que provocaron en el momento de la lectura. Hay nombres de la ficción que tienen el poder de avivar comportamientos, anhelos y contradicciones que permanecen inalterables y cuya simple evocación consigue despertar los sentidos aletargados…
